1Dichoso el que piensa en el débil; el Señor lo librará en el día de la desgracia.2El Señor lo protegerá y lo mantendrá con vida; lo hará dichoso en la tierra y no lo entregará al capricho de sus adversarios.3El Señor lo confortará cuando esté enfermo; lo alentará en el lecho del dolor.4Yo he dicho: «Señor, compadécete de mí; sáname, pues contra ti he pecado.»5Con saña dicen de mí mis enemigos: «¿Cuándo se morirá? ¿Cuándo pasará al olvido?»6Si vienen a verme, no son sinceros; recogen calumnias y salen a contarlas.7Mis enemigos se juntan y cuchichean contra mí; me hacen responsable de mi mal. Dicen:8«Lo que le ha sobrevenido es cosa del demonio; de esa cama no volverá a levantarse.»9Hasta mi mejor amigo, en quien yo confiaba y que compartía el pan conmigo, me ha puesto la zancadilla.10Pero tú, Señor, compadécete de mí; haz que vuelva a levantarme para darles su merecido.11En esto sabré que te he agradado: en que mi enemigo no triunfe sobre mí.12Por mi integridad habrás de sostenerme, y en tu presencia me mantendrás para siempre.13Bendito sea el Señor, el Dios de Israel, por los siglos de los siglos. Amén y amén.
Salmo 41
Nueva Versión Internacional (Castellano)
Al director musical. Salmo de David.
1Dichoso el que piensa en el débil; el SEÑOR lo librará en el día de la desgracia.2El SEÑOR lo protegerá y lo mantendrá con vida; lo hará dichoso en la tierra y no lo entregará al capricho de sus adversarios.3El SEÑOR lo confortará cuando esté enfermo; lo alentará en el lecho del dolor.4Yo he dicho: «SEÑOR, compadécete de mí; sáname, pues contra ti he pecado».5Con saña dicen de mí mis enemigos: «¿Cuándo se morirá? ¿Cuándo pasará al olvido?»6Si vienen a verme, no son sinceros; recogen calumnias y salen a contarlas.7Mis enemigos se juntan y cuchichean contra mí; me hacen responsable de mi mal. Dicen:8«Lo que le ha sobrevenido es cosa del demonio; de esa cama no volverá a levantarse».9Hasta mi mejor amigo, en quien yo confiaba y que compartía el pan conmigo, me ha puesto la zancadilla.10Pero tú, SEÑOR, compadécete de mí; haz que vuelva a levantarme para darles su merecido.11En esto sabré que te he agradado: en que mi enemigo no triunfe sobre mí.12Por mi integridad habrás de sostenerme, y en tu presencia me mantendrás para siempre.13Bendito sea el SEÑOR, el Dios de Israel, por los siglos de los siglos. Amén y amén.