1Que el SEÑOR esté contigo en el día de tu tribulación. ¡Que el Dios de Israel te libre de todo mal!2Que desde su santuario te envíe ayuda; que desde Jerusalén te fortalezca.3Que recuerde con agrado lo que le has brindado: tus sacrificios y ofrendas quemadas:4Que él te conceda lo que tu corazón anhela y haga realidad todos tus planes.5Que haya griterío de júbilo cuando sepamos la noticia de tu victoria; que se agiten las banderas en alabanza a Dios por todo lo hecho en favor tuyo. Que él responda a todas tus plegarias.6«Dios salve a su ungido rey». ¡Y yo sé que lo salva! Él le escucha desde el alto cielo y lo rescatará con su gran poder.7Algunas naciones se vanaglorian de sus ejércitos y armamento; pero nosotros nos gloriamos en el SEÑOR nuestro Dios.8Esas naciones caerán y perecerán; nosotros nos alzaremos y permaneceremos firmes y a salvo.9Otorga la victoria a nuestro rey, SEÑOR. Escucha nuestra oración.