1Alzaré mis ojos a los montes, ¿De dónde vendrá mi socorro?2Mi socorro viene de YHVH, Que hizo los cielos y la tierra.3No dará tu pie al resbaladero, Ni se dormirá el que te guarda.4He aquí no se adormecerá ni dormirá, El que guarda a Israel.5YHVH es tu guardador, YHVH es tu sombra a tu mano derecha.6El sol no te fatigará de día, Ni la luna de noche.7YHVH te guardará de todo mal, Él guardará tu alma.8YHVH guardará tu salida y tu entrada Desde ahora y para siempre.
Salmo 121
Nueva Versión Internacional (Castellano)
Cántico de los peregrinos.
1A las montañas levanto mis ojos; ¿de dónde ha de venir mi ayuda?2Mi ayuda proviene del SEÑOR, creador del cielo y de la tierra.3No permitirá que tu pie resbale; jamás duerme el que te cuida.4Jamás duerme ni se adormece el que cuida de Israel.5El SEÑOR es quien te cuida, el SEÑOR es tu sombra protectora.[1]6De día el sol no te hará daño, ni la luna de noche.7El SEÑOR te protegerá; de todo mal protegerá tu vida.8El SEÑOR te cuidará en el hogar y en el camino,[2] desde ahora y para siempre.