Psalm 143 | Nueva Biblia Viva Nueva Versión Internacional (Castellano)

Psalm 143 | Nueva Biblia Viva

Salmo de David.

1 Escucha mi plegaria, SEÑOR; responde a mi súplica, pues tú eres fiel y justo. 2 ¡No me sometas a juicio! Porque, comparado contigo, nadie es perfecto. 3 Mi enemigo me persigue. Me ha derribado a tierra. Me obliga a vivir en tinieblas como los que están en el sepulcro. 4 Estoy perdiendo toda esperanza; el temor me paraliza. 5 Recuerdo los días de antaño; medito en tus gloriosos milagros. Pienso en lo que tú has hecho. 6 Extiendo las manos hacia ti; me haces falta como la lluvia a la tierra seca. 7 Ven pronto, SEÑOR, y respóndeme, porque cada vez me deprimo más; ¡no te apartes de mí, o me muero! 8 En la mañana, muéstrame tu bondad para conmigo, pues en ti confío. Muéstrame a dónde ir, porque a ti elevo mi oración. 9 Sálvame de mis enemigos, SEÑOR, a ti acudo para que me escondas. 10 Ayúdame a hacer tu voluntad, pues tú eres mi Dios. Que tu buen Espíritu me guíe por un terreno firme. 11 Por la gloria de tu nombre, SEÑOR, sálvame; por tu justicia sácame de esta angustia. 12 Por tu gran amor, destroza a todos mis enemigos y destruye a quienes procuran dañarme; porque soy siervo tuyo.

La Nueva Biblia Viva TM Copyright © 2006, 2008 by Biblica, Inc. Used with permission. All rights reserved worldwide. “Biblica”, “International Bible Society” and the Biblica Logo are trademarks registered in the United States Patent and Trademark Office by Biblica, Inc. Used with permission.

Nueva Versión Internacional (Castellano)

Salmo de David.

1 Escucha, SEÑOR, mi oración; atiende a mi súplica. Por tu fidelidad y tu justicia, respóndeme. 2 No lleves a juicio a tu siervo, pues ante ti nadie puede alegar inocencia. 3 El enemigo atenta contra mi vida: quiere hacerme morder el polvo. Me obliga a vivir en las tinieblas, como los que murieron hace tiempo. 4 Ya no me queda aliento; dentro de mí siento paralizado el corazón. 5 Traigo a la memoria los tiempos de antaño: medito en todas tus proezas, considero las obras de tus manos. 6 Hacia ti extiendo las manos; me haces falta, como el agua a la tierra seca. Selah 7 Respóndeme pronto, SEÑOR, que el aliento se me escapa. No escondas de mí tu rostro, o seré como los que bajan a la fosa. 8 Por la mañana hazme saber de tu gran amor, porque en ti he puesto mi confianza. Señálame el camino que debo seguir, porque a ti elevo mi alma. 9 SEÑOR, líbrame de mis enemigos, porque en ti busco refugio. 10 Enséñame a hacer tu voluntad, porque tú eres mi Dios. Que tu buen Espíritu me guíe por un terreno sin obstáculos. 11 Por tu nombre, SEÑOR, dame vida; por tu justicia, sácame de este aprieto. 12 Por tu gran amor, destruye a mis enemigos; acaba con todos mis adversarios. ¡Yo soy tu siervo!